El ojo extruido

Adolfo Barberá

 

1_ Este es un drama callado y en rojo. Al finalizar no podrá decirse que no ha pasado nada. Este no es un circuito ni es un juego equilibrado ni se hace un uso ecológico de la energía. Hay drama. Hay pérdida. Bajo la apariencia de un juego, va a producirse un nuevo estado de cosas que no es neutral ni se puede reducir a una combinación de personajes. El salto del conejo blanco en la chistera es un juego serio. El fondo es oscuro.

2_ Variaciones de un eje azul en donde demorarse. El conejo parece meditar su tránsito futuro. En la pintura se arrancan colores y matices que no es posible presentar en otros medios. Imaginemos que los cuerpos (los personajes que tienen un cuerpo real de vela que existe fuera de la animación) son los personajes de un drama que ilustra una fábula de la luz descompuesta. El drama está ahí, en marcha, avanzando, mostrándose poco a poco. De vez en cuando un conejo de color nos recuerda que detrás del drama está la "verdadera" realidad, la descomposición de la luz.

3_ Siempre con un fondo oscuro, el mundo del laberinto tiene una apariencia azucarada donde una sombra es un reflejo. El drama se juega en el laberinto: nacimiento, conocimiento, amor, unión, ascensión, umbral y... final, consunción, humo. Ese drama ilustra, cuenta, narra una iniciación al color. Un rito iniciático que pone en escena un drama simbólico. ¿Qué hacen esos conejos de colores? ¿Son "asistentes"? ¿Espíritus auxiliares que nos guían en el desarrollo de un drama?

4_ El del alquimista y su cuerpo. La cabeza del conejo dispuesto en sosiego, lanzado en su inmovilidad. Pareciera que los seres de luz –los otros– tienen una génesis (habitual en Teresa Tomás) de objeto encontrado, mientras que los conejos son una suerte de código/color de un trayecto.

 5_ Perro y Alquimista contemplan desde el otro lado la aparición del Sol recién nacido a la vera de la clave de sol. Las sombras superpuestas de conejos recuerdan que el drama continúa. Al observar, por ejemplo, Claroscuro, cada personaje erguido se refleja en el pavimento ajedrezado. La imagen reflejada es el conejo que corresponde al color del personaje. En Laberinto de corazones, el rostro convexo de Candela refleja una cerradura, un conejo, así como las paredes del tramo de laberinto que tiene delante. En el rostro convexo de Alquimista, además del conejo se refleja Candela, lo que no deja de tener gracia: un personaje se refleja en otro personaje.

6_ Cada conejo está superpuesto a su personaje. En este Pentagrama ciego no hay negro, sólo éter lechoso.

7_ Sobre un fondo oscuro, ígneo, se superponen seres de luz, delgadas imágenes que apenas si tienen un cuerpo soplado. Los conejos están ahí, superpuestos y los personajes varían también. El girasol rojizo se eleva por encima de todo el mundo. Este es el momento misterioso, una travesía en la oscuridad.

8_ En el rostro convexo de Candela se refleja su destino. Alquimista refleja a Candela y algún corazón. El fondo es oscuro. Por ese fondo vendré de vuelta. Un espejo puede siempre no reflejar algo. O reflejar otra cosa. El espejo cumple en esos casos un papel revelador. El hecho de que en Claroscuro los reflejos de los personajes sean conejos, ¿quiere decir que el estatuto de los personajes es próximo al de un fantasma real*? ¿Tiene ese reflejo la función de desvelar la "verdadera" naturaleza de los personajes? ¿Es la realidad dentro del laberinto un mundo de conejos que aparece cuando el dispositivo de reflejo nos desvela la "verdadera" naturaleza de los personajes? Otra manera de preguntar, más temeraria: ¿Es cada uno de los siete conejos el alma del personaje?

* Fantasma real es el nombre de un personaje de una serie anterior de Teresa Tomás titulada Espantapájaros (Valencia 2002, Galería My Name´s Lolita Art). La artista reconoce en el texto titulado Messenger este parentesco: “Cuando pintaba Las sombras son un reflejo (Perro refleja en su sombra (espejo-gato) al conejo) me sorprendió pensar que ya había pintado una escena similar en la serie de los pájaros. Irreconocible: Fantasma real reflejaba en el espejo hexagonal a Galloina (hexágono que, por cierto, siempre fue luz).” Véase el texto integro del Messenger al final de este texto.

9_ Y allá, desde el fondo, viene con gran velocidad de cohetes disparados una anunciación de Lux. Candela, reducida a algunas pinceladas, supone a sus pies la sombra de un conejo. Hace mucho tiempo los fantasmas no tenían imagen (no se reflejaban) ni tenían seguramente sombra porque carecían de cuerpo. La escultura es el cuerpo. La escultura presta el cuerpo. Como quien dice: "Tú pon el cuerpo, que yo pongo la plata" o "Tú pon la cocina, que yo pongo los ingredientes" o "Tú pon la casa, que yo pongo la fiesta". La escultura pone el cuerpo.

10_ El pavimento ajedrezado nos recuerda que la sombra de cada personaje es el reflejo de un conejo. El encuentro está muy previsto, a punto de caer en un limbo. La obra pictórica que presenta Teresa Tomás es una invitación a la concisión y a la densidad. Los conejos están y no están, aparecen y desaparecen. El perro reflejado en el espejo-gato da un conejo rojo. Lógica implacable.

11_ Al Sereno se le vuelan las estrellas y allí en el firmamento reaparecen las figuras de conejos. Un torbellino azul que niega el laberinto. Vuelta atrás: los conejos tienen un estatuto IN/OUT, mientras que los personajes están siempre, sin duda. No hay IN/OUT de los personajes. Perro suscita al conejo rojo (su destino); Alquimista suscita al conejo naranja. Al extrudir el ojo de la cerradura, el artista lanza el drama de los seres de luz. El artista es el ojo extruido. El artista, en la laberíntica cámara oscura de su creación, pone en escena el drama y ese drama se hace visible en colores representados por conejos.

12_ Parece el cuerpo de Lux, el que va a saltar sobre el rodeo de una verdad asomada en cinco claraboyas. Que el artista haya construido el ojo de una cerradura en tanto que inicio de las transformaciones dice TODO. ¿Y qué es entonces de la diferencia entre los conejos y “los otros”? Los personajes son esculturas, tienen un cuerpo, mientras que los conejos son avatares del color. El desfile de personajes de cera es un mundo.

13_ Los invitados alcanzan la cortina. En este trabajo, más que en cualquier otro, se plantea el problema del punto de vista de una manera desmesurada, con una crudeza y una violencia insoportable. La descomposición de un conejo blanco en siete conejos de colores es otro mundo. La narración de una historia con las figuras (no se sabe a ciencia cierta si es la historia de las figuras o una historia con figuras) podría casi funcionar de manera autónoma. La manera como la luz es incorporada al debate es la descomposición del primer conejo en siete conejos de colores.

14_ Preñada rules. Se ve que es obra de arte ante el hecho indiscutible que el artista no se inventa una trama, sino que se encuentra con ella. A pesar de los sacrificios que la misma imponga, no deja de encarar la acción. Destejer el arco iris es ir al encuentro de una realidad que el artista, con su poder plástico, nos desvela. La consunción final, la consumación después del telón, una vez atravesada la membrana, es la compresión de los siete haces en un haz blanco.

 

MESSENGER

Fragmentos de la correspondencia electrónica entre T. T. y Adolfo Barberá

 ”A diferencia de los personajes, no he fotografiado los conejos de colores. El conejo blanco sí es escultura; a él corresponde una fotografía, pero es la única que no prende (ni en la pintura ni en la animación). Es la luz blanca.”

”Los otros de cera (cuerpo original) se derriten en la velada, el conejo blanco sale del sombrero y la preñada da luz, todo sucede al mismo tiempo.”

”Para que el conejo blanco pueda ser real (salir del sombrero) los seres de luz o conejos de colores deben desaparecer. Los conejos de colores los vemos gracias al prisma. El recorrido por el laberinto correspondería al momento en el que no se sabe dónde está el conejo en la chistera del mago.”

”Cuando pintaba Las sombras son un reflejo (Perro refleja en su sombra [espejo-gato] al conejo) me sorprendió pensar que ya había pintado una escena similar en la serie de los pájaros. Irreconocible: Fantasma real reflejaba en el espejo hexagonal a Galloina (hexágono que, por cierto, siempre fue luz).”

”Los otros comparten ciertas características con Fantasma real, la de la invisibilidad por supuesto. Pero hay algo distinto. En este caso la suma de los siete fantasmas reales da como resultado el conejo blanco. Los conejos de colores o los siete seres de luz son longitudes de onda o longitudes de personalidad. El conejo blanco y los siete conejos de colores son la misma cosa: luz. Es el ojo de cerradura (ojo del artista) el que nos permite manipular el tiempo, es la mirada poética la que nos acerca a un tiempo más real.”

”En el cuadro La chistera es el ojo de la cerradura el planteamiento inicial era pintar una imagen donde perro fuera el protagonista. Después de varias decenas de bocetos elegí precisamente el boceto en el que no figuraba el personaje, y sí el conejo. Este cuadro es anterior a la realización de la escena de la animación 3D en donde perro se refleja conejo.”

”La cortina de la velada es la cortina del teatro. Ideal para señalizar que algo comienza y acaba.”

”En el momento en que los otros cruzan la cortina (última membrana del laberinto) todo comienza y acaba, la velada coincide con la salida del conejo blanco.”

 

FUENTE: CATÁLOGO DESTEJER EL ARCO IRIS

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